Puxa hoy como que amanecí un poco dolido del estómago (supongo que gastritis+licor no es la combinación más inteligente) y eso, sumado a ciertas noticias que leo desde hace varios días sobre cierta encuesta hecha por el maldito maravilloso partido de la estrella me irritan bastante y, supongo yo, a la mayoría de peruanos con dos dedos de frente y que no nos comemos nada de lo que dice Anal Alan.
Bueno, dado que hay otros blogs y otros comentaristas que han analizado con mucha dedicación el tema este de las encuestas les dejo para su deleite y su conocimiento dos artículos bastante ilustrativos. Uno de Carlos Basombrío en Espacio Compartido el otro, un recuento hecho en Desde El Tercer Piso.
Además, una síntesis carlinesca:
Pero lo que llevaba a mi título del día de hoy es que esta cosa… la renovación congresal me suena como muy cortinita de humo (como nunca toda la bancada aprista se ha puesto de acuerdo al toque sobre esto no?, lo que resulta rarísimo en esa jauría caníbal) pues – gracias a las lluvias, a los idiotitas destructores de Chan Chan – ha quedado en el olvido y es la necesidad de una explicación coherente de algo tan simple como el financiamiento de las encuestas.
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