Antes que nada mis estimados lectores les deseo felices fiestas... ahora qué felicidad puede ser esa sabiendo que hoy mi amado presidente-líder-ídolo-deidad (de barro, por supuesto) - y gran hijo de pu... Anal García va a dar uno de esos mensajes que seguramente dejarán a medio país extasiado ante tan grácil oratoria (lo único que yo sentiré serán unas náuseas terribles y ganas de mandar al diablo a todos los que votaron por tamaño animal).
Afortunadamente yo no viví el primer gobierno del individuo éste, pero conversando con gente mayor, se siente el miedo de que de buenas a primeras vaya a saltarse con un discurso bien populista...
Bueno, después de las últimas cortinas de humo (buenos días señoritas Leysi S. y Lady B.) que permitieron que se pasara por alto la alianza apra-fuji (par elegir al asco de Velasquez Quesquén) y que no se le diera ni bola al análisis del gobierno según Toledo, también se me ha pegado una especie de pesimismo sobre qué dirá hoy... (o si es que la cagará)
Seguramente dirá que el país es lo máximo y que nos envidian no solo China, sino también Marte y medio sistema solar. Además que la inflación no es sino un producto de una inflación importada de Júpiter... bueno, como siempre - y como economista - me sentiré maravillado ante su soberbio análisis económico y no me quedará otra que empanzarme con comida...
Entonces mis buenos lectores, esperaremos para oír la maravillosa diarrea verbal oratoria de Alan y una fotito de Stephanie Cayo (cuerísima desde siempre) solo para alegrar la vista. A mí me espera comer chicharrón... (hasta empanzarme) y olvidar que el APRA me gobierna. Nos vemos.
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