El ganar a fuerzas tan terribles como el terrorismo debe ser una alegría grande para todos los que nos consideramos seres humanos y buscamos la dignidad de los demás y la victoria colombiana de ayer fue una de esas alegrías que se comparte.
Foto extraída de la galería de Radio Programas. Link a la galería completa aquí.
Bueno, regresaba a mi horrible departamento después de dar dos exámenes... (ah!!! Carajo qué cansancio) y tratando de ganarle al tráfico antes del partido de la U, esperando postear ni bien llegara. Así, a eso de las cinco escuchando Radio Programas se empiezan a dar las primeras declaraciones de los ex-rehenes y entre ellos a Ingrid Betancourt. (No les pongo imágenes o vídeos porque en el Útero encontrarán un post bastante completo al respecto. El post aquí.)
Aparentemente el rescate fue extraordinariamente bien planificado y sumamente inteligente (dado el nulo uso de armas), según el relato de Betancourt (Escuchen el relato aquí desde la BBC [usar Explorer, Firefox no puede, snif snif]).
Lo curioso es que en las declaraciones que siguieron casi de inmediato se encontraban también las de un militar (no sé si era un general) que estaba, al parecer, encargado de la operación. Bueno, yo esperaba que dijera que el rescate era lo máximo y también obra y gracia única y exclusivamente del ejército (y que acto seguido se pelearan tanto el presidente como los generales sobre quién fue el más participativo o de quién fue la genialidad, como en Chavín de Huántar).
Mi sorpresa fue grande cuando no pasó eso; sino que, por el contrario, se agradeció mucho el liderazgo de un personaje: Álvaro Uribe.
Caracho!!! - pensé. Qué fuerza de voluntad y qué carácter tan extraordinario debe tener Uribe para hacer de él de un carisma tal que un militar le guarde respetos a un civil, para que el militar lo vea como su líder.
Bueno, como cualquiera acostumbrado a ver gobiernos civiles que se echan ante come-echados militares (o que se alían con ellos) francamente eso es sorprendente.
Otra cosa que me sorprendió fue que ahí nomás, unos minutitos antes de las declaraciones de los propios secuestrados, un individuo dizque presidente, oyó la noticia y no perdió el tiempo para buscar figuración. No, esta vez no fue Chávez, sino mi siempre amado Anal Alan García ("Anal" le cae como "anillo" al dedo [qué jocoso voy hoy día]).
Bueno, siempre estoy abierto a enojarme con el susodicho porque tiene la mala costumbre de buscar una figuración enfermiza. ¿Por qué? ¡Porque ni siquiera el presidente colombiano había opinado todavía! A menos que a "Anal" le competa más la política colombiana que la nacional... (Aquí la noticia en El Comercio donde se ve que todavía no se sabía nada más que habían liberado a Betancourt y otros rehenes. Miren la hora: 17:39).
En conclusión, es por la forma cómo ha tomado Uribe una situación de guerra interna de manera tan inteligente, que ya quisiera ser él (en el sentido de liderazgo).
Bueno, luego de escuchar la noticia seguí conduciendo... para mi mal vivo a escasas cuadras del Monumental y ya por el Jockey vi que el tráfico se había ido a la mierda estaba congestionando... a la altura del templo de los mormones no me quedó otra que meterme por ahí y esperar frente a un parque durante dos horas a que aminore el tráfico... A pesar de estar a cinco minutos de mi casa tuve que esperar dos horas... Carajo y a mí que me encanta el fútbol peruano...
*Como esta vez la noticia es importante no hay nada de Crítica Viril.
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